Lina

6 mars 2007

En un dia aguado que nos desperto con un ploc! (a eso de las 7.15 de la mañana) Isa comenzo a perder sus "aguas" y enseguida supimos que el momento había llegado. Y en el camino hasta el cielo perdia sus aguas, nosotros a bordo de un auto que avanzaba como un barco, y yo al timon de esa nave, nadando entre las aguas, con esa inmensa responsabilidad, llevar a quien da vida!, lo poco que puede hacer un hombre, acompañar a la mujer, darle fuerzas, amarla.
Y despues todo vino tan rápido, tan rápido; las aguas siguieron cayendo, cambiando de colores y espesor, pero siempre tibias. Y el espacio se hizo para que mi amorcito asomara un cabello, y luego otro. Pero no era facil salir, y la mujer que da vida hacía un esfuerzo enorme! inmenso en medio del dolor, y yo solo podía decirle palabras que intentaran aliviarla o darle fuerza, y ponerle agua fresca en la frente, en el cuello, en la boca. Entonces la fuerza de mi amor (la mujer que da vida) pudo más que el dolor y fueron apareciendo más cabellos, todos húmedos, bellos (todo es bello y mágico en ese momento) Y otra mujer que de officio ayuda a dar vida ( la sage femme) entre sus manos, los cabellos se convirtieron en en una cabecita y enseguida aparecieron los hombros de mi pequeña hijita. En ese momento una seña basto (creo que me la hizo) y yo tome la niña entre mis manos, su cuerpito todo empapado en aguas de vida, y la ayude a salir completamente hacia este mundo de aire. La puse en el pecho de Isabelle, mi gran amor, la mujer que da vida, y casi simultaneamente ya tenía en mis manos las tijeras (que me dio la sage femme) para cortar el cordon de bienbenida al mundo de aire, pero tambien de agua, como aquella que caía tibia, incontrolable, de mis ojos en aquel momento.La misma que cae ahora, cuando veo las imágenes y les escribo a ustedes, la gente que quiero, y que conoceran pronto a nuestra hijita, Lina.